La identidad puertorriqueña que moldeó Julia de Burgos
Julia Constanza Burgos García, fue la hija de una familia pobre de 1914 influenciada por las problemáticas de su país. Pero con su poesía exploró asuntos como el pasado colonial de la Isla de Puerto Rico, el legado de la esclavitud y el imperialismo estadounidense.
De su constante escritura, se convirtió en colaboradora y editora de las publicaciones de Pueblos Hispanos. Y en una de sus tantas luchas se autonombró Julia de Burgos para simbolizar la posesión de sí misma; como defensa a los derechos de la mujer.
Su poesía le abrió las puertas de los círculos intelectuales puertorriqueños, sin embargo, al ser la década de los treinta no encajaba en ellos; los intelectuales puertorriqueños que moldeaban la identidad de la Isla no estaban listos para aceptar la justicia social de los descendientes africanos, y mucho menos que una mujer pudiese hablar. Razón por la que se marcha para marcar a Puerto Rico desde Nueva York.
Tras su difícil muerte por la enfermedad, sus restos fueron exhumados y repatriados a Puerto Rico. Ahora es considerada una de las predecesoras literarias del movimiento puertorriqueño en la isla y en Nueva York. Al día de hoy, hay escuelas públicas en Puerto Rico, Nueva York, Filadelfia y Chicago que llevan su nombre.
Como burgos y sus escritos puertorriqueños, María Antonia Sanchez Londoño estudiante del Liceo Salazar y Herrera, es la muestra del apoyo que le da la Institución y los docentes al talento joven. Antonia cuenta que quiere dejar en sus escritos el concepto del amor. “Si llego a tener un futuro como poeta, debo agradecérselo todo al Liceo y a las personas increíbles que lo conforman, porque le dieron un nuevo camino a mi vida”.